En este caso, se ha llevado a cabo el diseño y la ejecución de esta vivienda unifamiliar de nueva planta en una conocida urbanización. La vivienda cuenta con 250 m2 repartidos en una única planta en forma de “L” volcada hacia el jardín trasero donde se encuentra la piscina. Se ha buscado diluir los límites entre el interior y el exterior, con grandes huecos practicables y la extensión del pavimento interior de la vivienda hacia el exterior de la terraza.
Destacar también la piel de la vivienda constituida como una fachada ventilada con acabado de piezas cerámicas que, junto con un equipamiento de instalaciones de alta eficiencia, como paneles solares, otorgan a esta vivienda una calificación energética A y un consumo casi nulo de energía.